Estados Unidos gana 3-0 a Vietnam y sueñan con un nuevo título
- Las actuales bicampeonas se impusieron con dos goles de Smith y uno de Horan.
Estados Unidos ha ganado las dos últimas ediciones de la Copa Mundial Femenina de la FIFA™ y es el equipo más laureado del torneo, con cuatro títulos. Y así, con esa historia a sus espaldas, con la experiencia del que sabe lo que quiere, salió a jugar el cruce con las vietnamitas.
Alex Morgan, Megan Rapinoe y Kelley O’Hara disputan su cuarto Mundial. Esto significa que, en total, doce jugadores estadounidenses han logrado ya en cuatro o más ediciones. Hoy, por caso, Rapinoe estuvo en el banco de suplentes e ingresó en la segunda mitad. En el ataque, Trinity Rodman, la estrella en ascenso que apenas inició el encuentro sufrió un golpe que asustó a todos.
Con movimientos aceitados en ataque y velocidad, una combinación entre Morgan y Sophia Smith (en su debut mundialista) le dio el primer gol a las norteamericanas a los 14 minutos. Precisión y eficacia con el pie izquierdo del mejor futbolista de la última Liga de su país. La disfrutaron los 41.107 espectadores que asistieron al Eden Park.
A los 44, Rodman se metió en el área y Thi Loan la cometió un penal. Sin embargo, la mítica Morgan ejecutó con demasiada justeza al medio del arco y Kim Thanh Tran se lució bajo los tres palos. Un momento histórico para el fútbol femenino de su país. No es poco.
Ya en tiempo aficionado, otra vez Smith (de apenas 22 años) aprovechó un rebote y mandó la pelota al fondo de la red. En un principio el gol había sido anulado por un fuera de juego de Morgan, pero el árbitra Bouchra Karboubi lo convalidó a instancias del VAR.
El gobierno del juego siempre estuvo en las manos de los estadounidenses. Es cierto, no se lucieron en los primeros 45 minutos, aunque apelaron a la efectividad. Rodman, incisiva, precisa peligro por la banda y obtuvo su habilidad para enviar centros. Quedaba evidenciada la diferencia de velocidad en ambos conjuntos.
La fiesta de las campeonas del mundo se desató a los 33 minutos del complemento, cuando Smith tiró un centro atrás y lo conectó Lindsey Horan, la N° 10 y capitana del equipo. Un premio merecido para una de las futbolistas que más había buscado el arco rival.
Estados Unidos, en el estreno, se marchó con una sonrisa. Vietnam, más allá de la caída, sabe que lo suyo fue muy digno.
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